domingo, 3 de agosto de 2008

Ravenloft:Remains pt.2: Caps.1 y 2

Regresamos a Ravenloft; pero esta vez, a Nightshade-Ravenloft: Remains pt.2

¿Por qué este salto, si la parte 1 está inconclusa?

Porque genera suspenso por sobre lo que ocurrió con los personajes de la 1ra parte (y muchos de ellos, veteranos de Barovia); porque lo que les ocurrió: su supuesta desaparición; es “elemento de conversación” en la trama.

Y porque quise darle protagonismo al movimiento ultrasecreto fundado por Rickard: Nakazanye S.A. (O conocidos con su nombre de fachada: Helados BRESLER [lol]).

Ambos nuevos personajes son miembros de la organización: Gustav Leonhardt (Lucho), guerrero auto embestido en la fe de Helm, y entrenado en magia clerical; y Barry Lindon (Iván), cazador experto en armas de fuego de precisión, y con una inteligencia superior que le ha permitido develar secretos de la magia arcana. Su oficio es ser Purgadores (de muertos vivientes) [Ambos Pjs. Están construidos con el nuevo método que utilizaremos, es decir, la categoría “híbrida” o “sin-clase-específica”]




Resumen cap.1

Barry y Gustav han llegado a Pont a Museau, en el dominio de Richemulot; Barry es nativo del dominio; y Gustav, nativo de Liffe (no es necesario explicar como llegó acá). Ambos se conocen desde hace un año y operaban en Crawford.

Reciben la misión de Simon Callow, lider agente de Nakazanye en Pont a Museau, la misión de infiltrarse en la catedral de Ezra y robar pruebas de una instigación de guerra, además de asesinar a un enviado desde Invidia. En la reunión tocan una vez más el punto de la vieja herida: hace más de un año que no sabe nada de los líderes fundadores de la organización, Rickard y Sayid; les recuerda que la misión de traer o buscar toda la información que se pueda sobre ellos aún está en pie.

Durante la tarde en la plaza, les llama la atención un viejo loco que grita cosas en la fuente de la plaza: parece estarles advirtiendo a ellos de algo: Strahd, amigos desaparecidos, Ventoferoce, cuando sin embargo, el viejo habla al aire. El viejo es llevado prisionero por la guardia.

Entran a la Catedral, pero no todo resulta como planeaban; consiguen escapar tras asesinar a un sagaz joven guardía-hechicero, pero finalmente es la Enviada es quien da con ellos: es una vampiresa, hermosa, terrible, de quien con dificultad se desembarazan cuando escapa en la bruma.

Luego de una noche en vela, a la intemperie, temerosos, tan solo protegidos por el aura de la Flamberge Santa de Gustav, logran escapar.

Al día siguiente, planean o asaltar la Catedral y destruirla, o rescatar al viejo. Gustav y Barry, junto con Simon y Gregoria (otra agente) hacen lo segundo; de todas formas, ambas opciones significaban huir de la cuidad. El rescate del viejo lo efectúan con tranquilidad, hasta que encuentran resistencia del mismo joven hechicero a quien habían asesinado antes. Nuevamente, y a duras penas lo eliminan, incrédulo, está vez dando claras muestras de ser algo más (o tal vez menos) que humano.

Rapidamente se teleportan (con una Runa de Retorno) hacia un punto fuera de ciudad; pero, el quinto agente, Ryszard, los traicionó, y el niño enviado a crear el “punto” fue asesinado, y el punto creado en medio de un oscuro bosque, donde empiezan a ser perseguidos por criaturas del lugar, hostiles, las cuales apenas pueden ver, en la prisa de huir.

Gregoria y Simon caen; desaparecen. Gustav cae y se debate por su vida, Barry intenta hacer algo; cuando el viejo, inesperadamente, levanta su viejo bastón y barre el lugar con una luz potentísima como el día: El trasero se les relaja por unos minutos. Sorprendidos y sin preguntas corren hasta a la ciudad más próxima: Ste Ronges.

Allí irrumpen en una casa clausurada, donde finalmente descanzan.

Y se me olvidaba: preguntan su nombre al viejo. Se llama Don Isaac, Isaac Wislocki, y tiene una historia que contarles.







Resumen cap.2

Temprano en la mañana, despiertan al viejo y lo interrogan: éste les cuenta sobre amigos suyos que desafiaron a Strahd y desataron todo el poderdel Lord sobre ellos mismos. Les cuenta de la desgracia y dolores que sufrieron, y de su final desaparición. El viejo podría tener respuestas sobre el misterio de Rickard y Sayid.

Apoyados económicamente con unos ahorros que don Isaac les entrega, compran carruaje y caballos percherones para tirarlo: El carruaje es extraño, es un carro grande, de madera roble, pintado rojo, con los bordes pintados de negro, le encuentran compartimentos secretos y ropa de disfraz en sus closets: es como una pequeña casa rodante.

Viajan en dirección hacia la villa Della Mirandola (donde les recomendó Simon); pero pasan por Mortigny para pasar la noche. Se hospedan en la “fuente de Soda y hospedería Vladislav”.

La noche distó de ser tranquila: los ruidos del exterior no permitíandormir; además de los ladridos infernales del perro que cuidaba el patio de la cochera (donde tenían el carro). Su puerta estaba bloqueada, el carro se sacudía como por una multitud y sin embargo no se veía nadie; el perro se calla, lo encuentran muerto, sin marcas; una cabeza se asoma por el techo, y Barry le dispara sin casi verla. Estan muertos de miedo.

Huyen en el carro en medio de la noche y en medio de una ciudad cubierta por densa bruma; hasta llegar a su plaza central, y buscar un lugar donde alojar más tranquilo: las gentes del lugar, que paseaban en vida nocturna, parecen un tanto raros, un tanto “idos”, o tal vez “poco menos que vivos”. Muertos de miedo, son localizados por un grupo de Nakazanye de la ciudad de Ste.Ronges. Descanzan en una posada de amigos del grupo, y continúan con la recomendación de Marcus, el lider-agente en la ciudad, de contactar al grupo que se aloja en los bosques entre “Rien” y “Della Mirandola”. Otra cosa: Marcus les dice que en los archivos, no existe ningún Simon Callow, lider-Agente de Pont a Museau. Ellos comienzan a sospechar.

En un punto de las afueras del bosque al que iban, cuando el vistani que los acompañaba había ya entrado al bosque para hacer contacto; ellos tienen un encuentro más que extraño: Sin preguntar siquiera, Barry dispara contra un carro “real” que llevaba los emblemas de Invidia. Muerto el cochero, sale de él una sombría figura, que tras desmoralizar a Barry y Gustav casi tan solo con su presencia, se presenta como Lord Azalín. El Lord hace mofa de ellos, y de cuanto irritan con su grupo de terroristas a Strahd y los otros Lores: él, por su parte, no les teme; al contrario, los encuentra entretenidísimos. Los deja vivir, con la oferta hecha de convertirse en sus sirvientes. El Lord se va, no sin dejar su marca en los asustados purgadores.

Ya en el campamentos Vistani-Nakazanye, un sacerdote-médico les advierte que la marca de Azalín, es un “ojo” del Lord, y que éste ve ahora a través de sus ojos. Les aplica un sortilegio temporal para provocar un mal funcionamiento de la maldición, pero Ferenc, el líder-agente les advierte que la única solución permanente es mediante magia arcana y negra. Les da un nombre: Marianne Emeraldas, en Skald, en el dominio de Kartakass. Ella podría encontrar la solución. Pasan la noche comerciando con los Vistani y recreando la vista con las bailarinas de éstos. Increíblemente, tienen noticias sobre Rickard y Sayid, los líderes fundadores: un tal Gadriel afirma haber escuchado de ellos en Invidia, y tiene un cartel para probarlo (ver cartel al final del texto)

El viaje, gracias a las artes Vistani, demora 4 días, por río, en un pequeño Ferry. Ya en Skald, y en su “casa rodante”, los muchachos buscan como llevar a cabo el “contacto” con Marianne: Necesitan depositar una botella con 4 cucharadas de sangre de mujer virgen en la tumba con el nombre de Marianne Emeraldas, ubicada en las ruinas de la vieja fortaleza de la ciudad.

La suerte es tal que una chica de la compañía de teatro los toma como artistas y sube a su carro para guiarlos. La aturden, le sacan la sangre, y disimuladamente, Gustav la cura, y la ponen a salvo. Más suerte aún tienen cuando les pagan al creer que son de una compañía de Armonía y les pagan 3.000 mo por no llevar “un encargo” (que nunca existió) a tal ciudad.

Finalmente realizan el rito en la tumba de Marianne, y nada pasa, un guardia los saca del lugar.

Se dirigen a la zona baja de Skald y se hospedan en la humilde hostal “Gato Negro-Gato Blanco”. En esta zona de la ciudad el crimen asola.

Durante la noche de lectura de Gustav, quien hacia turno leyendo un texto sobre Tempus, las luces se apagaban en la calle, los gritos interrumpían la calma, y los hampones, como serpientes, hacían su negra labor por las calles desoladas. La vela se apaga, humea, y vuelve a encender con una azulina luz; se acompaña por un frío repentino hasta los huesos. Alguien, desde atrás suyo, toma el libro de Gustav, comenta algo con una voz femenina que llega hasta las entrañas tan solo en lo hermoso de su entonación. Los tres, se quedan fijos contemplando a una despreocupada y galante mujer, la más perfecta que hayan visto. Esta los mira, y rompe el hielo: Bueno, ¿me podrían decir para que me despertaron de mi bonito sueño? Eh?

Por fin conocen a la tal Marianne, y dios, que gusto el haberla conocido, piensan.

Barry, sin embargo, hace una última y tímida pregunta: Disculpe…. Este… ¿es usted vampiro? ¿ah?...

Próximamente, Nightshade-Ravenloft: Remains pt.2; cap.3


Cartel de ofrecimiento de recompensa por la captura vivos o datos sobre su paradero, puesta sobre las cabezas de Rickard y Sayid, pegados en las paredes de ciudades en Invidia, según el agente de Nakazanya, Gadriel Chandos. Al parecer los muchachos están vivos, y haciendo de las suyas.